06 agosto, 2006

Egipto: la génesis

La historia oficial siempre fue enemiga de la verdad. Los mortales como usted y yo tenemos acceso a una parte de ella, y sólo a aquella que nos quieren dejar ver. Así, pocos conocen, por ejemplo, que Newton dedicó casi el 90 % de su vida a descifrar el código oculto dentro del Antiguo Testamento, o que Hitler estuvo casi 2 décadas buscando el Santo Grial en las zonas más inhóspitas.

Ferrante Kramer, permanente transgresor, objetor del “establishment” - cuando aún esa palabra no se conocía - inconformista por naturaleza y audaz como pocos, fue quizás el precursor del conocido Indiana Jones (se dice que en él inspiro su personaje Harrison Ford), cuando en aquel sombrío 1957 partió hacia Egipto en busca de las respuestas que su padre le negara al enterarse que era adoptado.

Aún se conserva registro de aquella sorpresa y decepción en su niñez (tenía tan sólo 12 años), cuando en un reportaje en “La voz de Salta” (1) confesó: “... en mi interior lo sospechaba, siempre me sentí ajeno en esa casa en Guachipato ... dentro de mí escuchaba el llamado de las ligas mayores” . Y continúa: “... mi padre putativo me dijo que cuando supiera la verdad no podría con ella, que no hurgara más... que la curiosidad es cosa del diablo; ... el tenía los ojos llenos de miedo, y yo no entendí hasta que fue muy tarde!”

El periodista, que no era otro que un tímido y juvenil Víctor Sueiro, repreguntó a Ferrante “...¿ que fue lo que descubrió tan tarde maestro ? " .... Sueiro comenta que Ferrante desplegó un papelito que este sitio pone a disposición de todos por primera vez. El escrito, ofrecido aquí en “negativo” para que se noten las trazas, reza “Tutan Kamon”, y es copia fiel de la talla en piedra encontrada en la pirámide del famoso faraón egipcio. Sin emitir otro comentario, y “ ....mirándome fijo a los ojos con melancolía y tristeza de niño rico”, agrega Sueiro que Ferrante se alejó de él aquella tarde, dejándole en su mano ese enigmático papelito.



Años más tarde, y ¿muerto ya Ferrante ?, los cazadores de mitos como Ferrigno Oyarzábal, Facundo Díaz Reyna o el afamado egiptólogo Tulio Vivar del Campo, fanáticos de la azarosa vida del poeta, creyeron encontrar una relación entre Ferrante y aquella anécdota vinculada al antiguo Egipto.

Todos ellos coinciden en afirmar que lo que se lee en aquella pirámide, y lo que encontró Demian y nunca se atrevió a contarle siquiera a sus más íntimos, fue la “revelación” que cambió para siempre su terrenal existencia, y lo lanzó hacia dimensiones que únicamente alcanzan los sobrehumanos, los elegidos por el destino.

También por vez primera, este blog pone al servicio de la comunidad mundial la primicia, hasta ahora compartida por muy pocos, del que se “cree el verdadero origen de Ferrante Kramer”, y de un dato tan importante que “... podría cambiar el curso de la historia tal como la conocemos”, afirma Stephen Hopkins, renombrado astro físico americano.

Amigos lectores, les proponemos un desafío: presten atención a la siguiente imagen. Con un poco de imaginación, reemplazando tan solo algunas letras, y ubicando otras donde no las hay porque el paso del tiempo las borró impíamente para ocultarnos la verdad, acaso lleguen a la estupefacción que nos invadió a todos cuando tuvimos acceso a esta revelación.


No temamos, y mantengamos la calma. Sé lo que estarán pensando. Los hubo conocidos como Nostradamus, Parravicini, Nilus....


(1). Abril 14, 1964, página 8, Suplemento Cultural

1 comentario:

Funny Bunny dijo...

Permitanme hacer un comentario. Por casualidad estaba en el google buscando información sobre un escritor peruano que admiro mucho, y encontré este blog. Me gustaría saber si puedo contar con toda la data que aqui se ofrece pues estoy escribiendo una obra sobre poetas latinoamericanos. Yo soy de Chile y me sorprendió ver que haya gente que se interesa por la literatura peruana y especialmente en F. Kramer. No tengo el tiempo para ver todos tus posteos pero con gusto lo haré quizá mañana. Te felicito por tu blog!. Mis cordiales saludos.

Zulema García Las Condes