18 septiembre, 2006

Martín Rellenesi y el locutorio del tiempo

En los últimos 25 años, mucho se ha escuchado sobre cierta capacidad alquímica de Ferrante Kramer en relación a haber sido visto casi al mismo tiempo en dos lugares equidistantes entre sí.

Siendo realistas y totalmente racionales tenemos claro que esto es técnicamente imposible. Nosotros tenemos claro que Ferrante tuvo muchas cosas para destacar en su historia, pero lo que seguro no tenia era caracteres mesiánicos.

Martín Rellenesi, el mago de devoto (1) siempre se autoproclamó seguidor de Ferrante y en más de una oportunidad dijo saber el secreto de Demian y su poder para trasladarse de un lugar a otro.

En el círculo íntimo de DFK, nunca le prestaron atención y eso a Martín le resultaba insostenible.

Una tarde, de septiembre, Rellenesi se acercó a la sede de la fundación DFK con alguien que dijo ser escribano (2) dispuesto según decía a “desenmascarar a Ferrante”.

Walter Liberatti (presidente de la Fundación DFK), juntó a varios integrantes de la Comisión Directiva (Elio Uniaga –Vicepresidente-; Salvador Tamayo –Tesorero- y Uriel Lisotte –buffetero-) para darle una chance a Rellenesi de contar su historia.

Rellenesi, se sentó, picó un par de salames que había alcanzado Lisotte, y empezó a contar: “Se dice que en distintas partes de la ciudad hay puertas que conducen a otras dimensiones…, de esta forma, hay una puerta que conduce directamente al infierno y otra que conduce al paraíso“.

Mientras Rellenesi hablaba, Elio Uniaga intentaba olerlo para determinar vestigios de alcohol. Esta conversación era una pérdida de tiempo.

Rellenesi continuó: “Durante años seguí a Ferrante, porque había algo en su personalidad que me llamaba. Pero siempre le perdía el rastro violentamente y volvía a encontrarlo como si nada a los quince o veinte días, y cuando pasaba el tiempo y me contaba donde había estado, sus relatos se contradecían. Llego a decirme que en la primer semana del mes de febrero de 1966 estuvo casi al mismo tiempo en Estados Unidos durmiendo en un Buick abandonado, y en una campiña Francesa de retiro espiritual buscando encontrar al Dalai Lama”

Mientras mas fervor ponía Rellenesi en su relato, más bostezaban los integrantes de la Fundación DFK. El relato continuó: “Pero un día lo descubrí!!! En el Locutorio que había en la esquina de Mitre y Venezuela en Martelli, las cabinas 1 y 2 tenían poderes ocultos. Marcando un número en especial, te permitían viajar por el tiempo!!!!”

Las carcajadas resonaron en el lugar. Pero Rellenesi incólume continuó: “Ferrante todos los sábados a la mañana entraba al local, y amablemente con una sonrisa le decía al empleado: ¿tendrá una cabina? A lo cual el joven indefectiblemente le contestaba: “pase por la uno…” pasaba horas dentro de la cabina y al salir, lo hacia no por la cabina 1 sino por la 2 !!!! Con otras ropas, distintas a las que había entrado y cargando pequeños bolsos de mano y hasta abrigos de piel en pleno verano”

De ahí en más, la mayoría de los asistentes (escribano incluido) perdieron la compostura. De las risas pasaron a las risotadas y de las risotadas al llanto incontenido, la situación estaba empezando a tomar ribetes inesperados…

Rellenesi continuaba: “Varias veces intenté cruzarlo y preguntarle: Demian ¿de donde venís? Y siempre la misma respuesta escueta mientras nervioso apuraba el paso: “del locutorio”. Lo seguía casi hasta General Paz insistiéndole pero nunca tuve otra respuesta. El segundo sábado de abril de 1970, al llegar a la puerta de Gambrinus (3), a Demian se le cayo del bolso un papel yo lo recogí sigilosamente. Podría ser una prueba de sus viajes astrales. Sabía que podía serlo. Lamentablemente era un ticket de la tintorería de Garcia del Río y Tronador. Me había engañado, pero yo sabía lo de sus viajes. El me lo ocultaba pero yo me iba a vengar.”

“Un viernes a la tarde pase por el locutorio y pedí una cabina. La empleada de la tarde casi sin mirarme me dijo “cabina 2…” me senté en el banquito, cerré la puerta y respiré un poco el olor. Se sentía olor a mar. ¿Algún viajero por el tiempo habría recorrido las aguas antes de salir por la cabina o habría un caño roto del vecino y la alfombra que recubre las paredes de la cabina acumularían humedad?”

“Eso no importaba. Estaba dispuesto a desenmascarar a Demian. Sus viajes por el tiempo habían acabado. Conecté al enchufe que se encontraba en la pared de la cabina un calentador de agua de pava y lo deje en contacto con la alfombra de la pared. Tenia 5 minutos antes del incendio…no habria más viajes temporales”

Salí disparado de la cabina diciéndole a la empleada (que ni me miró) –no me pude comunicar…- y Salí por Mitre. Me colgué a un 41 que iba para Munro y sin mirar atrás sentí la satisfacción de haber terminado con la alquimia de Ferrante Kramer.”

El clima en la habitación cambió violentamente. Ya nadie reía. Todos se preguntaban donde quería llegar Rellenesi, La idea general seguía siendo que esa reunión era totalmente al pedo (4).

“A la mañana siguiente –continuó Rellenesi mas tranquilo- volví a lo que quedó del locutorio. Todavía estaban trabajando los bomberos de Martelli y una dotación de bomberos de San Isidro…el local quedó totalmente incinerado. La perrita que atendía se salvó. Solo sufrieron quemaduras algunos cliente ocasionales. Eran las 10 pasadas. Me mezcle entre las vecinas esperando ver la cara de Ferrante cuando llegara y viera que su puerta para los viajes temporales se había cerrado para siempre!!!”

“A las 15.45 desistí en mi espera. Ferrante no vino. Me imagino que no habría aguantado la decepción. Cansado pero feliz me volví a la plaza de Devoto, a mi banco preferido a dormir una siesta. A las ocho de la noche pasadas, un viento me despertó… al levantarme vi que junto a mis zapatos había un sobre que decía Sr. Rellenesi”

“Lo abrí. Estaba seguro que hacia años nadie me llamaba señor. No podía ser un error. Dentro del sobre había una postal de la torre de Pisa y al dorso en letra manuscrita un mensaje que decía:

"Nadie puede torcer el destino
El que nace barrigón,
es añudo que lo fajen…”

Saludos. DFK

Después de eso, Salvador Tamayo hizo una seña y Liberatti interrumpió la charla, invitando a Rellenesi a dar por concluida la reunión. Entre todos insistieron en sacar a la calle al obeso visitante. Al salir, una ambulancia de la Municipalidad con dos enfermeros de blanco y una camilla se lanzaron sobre Rellenesi y lo ataron mientras a los gritos le indicaban al conductor: “Al Borda de una!”.

Liberatti, Uniaga, Salvador Tamayo y Lisotte se miraron y suspiraron aliviados…había estado cerca.

(1) llamado “Mago” porque sin trabajar, viviendo en los bancos de la plaza de Devoto, mantenía un peso de 160 Kg.
(2) El acompañante nunca mostró credenciales que lo acreditaran como tal, aunque nadie reparó en que Rellenesi no tendría dinero para pagar sus servicios
(3) Un restaurante clásico ubicado en la esquina de Av. Mitre y Gral. Paz.
(4) En vano.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

esta historia debió formar parte de los Archivos Ferrante Kramer... Mete miedo!!, fuera de joda.
Yo venía leyendo tranquilo las pararruchadas de este peruano, y me parecía inofensivo.
Pero... Cristo!!... estoy paralizado del cagazo!!!. Quién es este tipo que so pretexto de presentarse como un nabo atómico, realiza proezas rayanas con lo inimaginable??
A la Fundación y a quienes corresponda: arrojen luz, basta de intrigas!!!. Demian está vivo o muerto? Lo de este Blog es joda o viene en serio?. Estoy hasta las pelotas del miedo que tengo....
Recién sentí como si alguien me tocara la espalda.... Dejo de escribir, voy a ponerle más atención a mi habitación.... se está poniendo fría y oscura.

Sto. Sounders

Anónimo dijo...

Tengo entendido segun me conto mi abuelo MAcareno Dildo, que el señor DFK supo ser copiloto del olvidado Juan Manuel Bordeau ( padre de Juan Cruz ) de ser cierto este relato que contaba Macareno, quiero saber si algun documento de la fundacion dar por cierto este relato, ya que de ser asi..estaria en juego..una apuesta que tengo con la señora Graciela B, viuda del mismo..que entre copas y copas..no supo contestarme o lo que es peor..casi termina confesandome el verdadero origen de Juan Cruz, lo cual todo eso me puso muy nervioso, pedi otro trago mas.. y al final de la velada, ya nada recorde.
saludos
Dr.Dildo

Anónimo dijo...

Querido Mr. Dildo: gracias por participar otra vez. Nos place saber que tu abuelo Macareno no perdía su tiempo. Y que legó a su nieto uno de los más preciados secretos de Demian. No te ilusiones: Juan Cruz no es hijo de Demian!!, es hijo Jorge Luis y de una mujer fácil, producto de una cita a ciegas.
En cuanto a ti, muchacho, hay mucho de lo que no hiciste esa noche de copas con la Borges, que Demian sí hizo... y con una Gra mucho más joven y pulposa. Te invitamos a seguir leyendo las entradas, en particular las que avala la Fundación. Allí, pronto, conocerás la verdad.