03 septiembre, 2007

Farándula vs. Cultura: Wanda vs. Demian

Y el presente del Peruano Dorado pudo más!...

“La única verdad es la realidad”, solía decir el General Perón, y Demian no pudo escapar a esa profecía. El “reality”, “Internet”, “Los vídeos de Wanda Nara”, “Su desnudo, junto al de Nicole en pleno centro porteño”, se lo devoraron, dejando en un segundo plano –por el momento-, su atribulada existencia como uno de los más enigmáticos personajes de la literatura latinoamericana.

Demoradas quedaron las tradicionales historias sobre sus desventuras y fracasos; siquiera tuvimos tiempo para publicar la tercera y ultima parte de “La Liga de Héroes Paralela”,

Pero, la entrada del Gran Ferrante al mundo del espectáculo no nos dejó espacio para más. Y para peor, la cosa se sigue complicando. Si no, qué pensarían si alguien los llamara pasada la medianoche para preguntarles si tienen el número de teléfono de Chachi Tedesco..

Bueno, eso nos pasó a nosotros, y nos ocurrió lo siguiente:

- “Hola, quién habla”, preguntamos un poco alterados, eran casi las 2 de la mañana..

- “Soy Demian... Demian Ferrante Kramer... (pausa)... Ustedes son los autores del Blog que cuenta mis historias por encargo de la Fundación que lleva mi nombre”, inquirió en un tono tan firme y seguro, que allí mismo nos dimos cuenta del porqué Ferrante Kramer es quien es en todo el mundo...

- “Si, Demian... Qué desea a estas altas hora de la noche... ?”, volvimos a la carga, pero haciéndole notar por el tono de nuestra voz que estaba un poco desubicado.

- “Estee... Qué saben de Jaiscul miúsical y de una tal Chachi Tedesco?”, se despachó, como si preguntara por Walter Liberatti...

Nosotros sabíamos para qué quería saber sobre ella. Antes del affaire Wanda Nara, esta chica había sido expulsada del “High School Musical”, un programa patrocinado por Disney, debido a que un vídeo suyo junto a su novio teniendo relaciones sexuales la había comprometido al punto de no quedarles otra alternativa que sacarla del reparto, más allá de su notable talento...

El peruano se había enterado también de ella. Por Internet, como se enteró de todo lo que últimamente lo está alejando de la literatura.

Y le seguimos la corriente, pero intentando volverlo a su mundo...

- “Si, maestro, sabemos quién es, pero no tenemos nada de ella. Ningún dato, nada. Pero, para qué quiere ubicarla?”, le dijimos, tan seguros como él..

- “Estaba buscando algunos datos de esa señorita... Necesito una asistente, y me la recomendaron como muy buena para los apuntes... Estoy tirando las primeras líneas para un nuevo libro, ustedes saben, necesito alguien que me ayude...”, mencionó como al pasar.

No cabía duda alguna que el Peruano Dorado quería disimular que lo que estaba buscando era ese vídeo o algún teléfono para contactarla. Por primera vez, Ferrante estaba desbocado por la lujuria... Desde lo de Wanda, era una máquina que demandaba sexo, sexo y más sexo..

- “No, Demian, lamentamos no poder servirle, maestro”, nos excusamos, aunque en el fondo los dos que hacemos este Blog nos mirábamos absortos.

- “Bueno, si saben algo, ya saben dónde encontrarme ... En la pensión de Don Horacio, en Martelli, OK?”, sentenció entre conciliador y amenazante. Otra vez, ese dejavú de sentir la presencia de un grande se apoderó de nosotros. Cuando Demian se ponía firme, amedrentaba al más hombre.

- “Qué duerma bien, maestro!”, y nos despedimos.

Nos habíamos desvelado. La emoción, la situación... Todo!... Y decidimos salir a dar una vuelta...

- “Y si vamos a visitarlo?”, le dije a mi compañero de Blog.

- “Dale!”, me dijo... “Estamos cerca, vamos!”.

Estábamos a unos cien metros de la pensión, y lo vimos... Parado en la puerta de ese hotelucho de mala muerte. Vestía un pantalón raído, y una musculosa que desde aquella distancia dejaba ver tremendos agujeros. Un desastre!

En eso, vimos acercársele a un muchachito. Un joven de unos veintipico de años, no más.

Nos parapetamos detrás de una columna. Difícilmente nos viera; nosotros sí veíamos muy bien la escena. Una luz de mercurio daba de lleno sobre ellos...

No entendíamos bien, pero el Peruano Dorado hizo girar al muchacho sobre sí, dando una vuelta completa, como si estuviera desfilando sobre la punta de la pasarela.

Allí nomás, Demian sacó de su bolsillo algo que parecía ser un billete de 10 pesos. El pibe lo tomó, e ingresaron juntos al hotel. El último que lo hizo fue Demian; antes de cerrar la puerta miró hacia ambos lados, como queriendo ver si alguien había presenciado la escena...

Alex y yo nos miramos estupefactos....

- “Vos viste lo mismo que yo?”, le dije...

- “Lo del pibe, no?... A eso te referís?... Sí, un asco!”

Le respondí que sí para no quedar desubicado. Pero, en realidad, mi asombro era por otra cosa... Ferrante había sacado un billete de su bolsillo... Increíble!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Demian no necesita mezclarse con estos personajes de segunda para obtener trascendencia. Por favor dejen de lado estas historias de segunda y vuelvan a la escencia del Blog. Hay miles de personas que esperan ansiosas el final de la historia del hombre alado de almagro.

Sigan asi, que algun dia se van a avivar y ahi se va a pudrir todo

Marcelo Polino
Palermo