
Y no era para menos... Había sido seleccionado para reportear a una celebridad de las letras, el gran José Saramago, casualmente en Argentina allá por mediados de los ‘90.
La gente de Editorial Planeta estaba buscando a una persona a la altura de las circunstancias. A algún hombre “del medio” que estuviera dispuesto a enfrentar la avasallante personalidad del escritor portugués. Y Ferrante era del medio, digamos mediocre; al menos en eso no se equivocaron al elegirlo.

Algunos afirman que la confusión se habría producido a raíz del traspapelado de una solicitud de empleo para cubrir un puesto de “Guardia de Noche”; “... Lo más probable”, según estudiosos de la vida y obra del Peruano Dorado, ya que por aquella época Editorial Planeta necesitaba reforzar su seguridad debido a la gran cantidad de robos de la que había sido víctima.
Ante la falta de mejores candidatos, el nombre del peruano comenzó a tomar cada vez más fuerza. Y de allí al mito, hubo muy poco. A la pregunta “Queda solamente para llamar a Ferrante Kramer.... Perooo... ¿Quién carajo es este Ferrante Kramer?”, salieron al ruedo los que decían no saber nada, como también los fabuladores de siempre -dispuestos a contestar cualquier pavada con tal de figurar-, que afirmaban haberlo visto varias veces por televisión, que era “una eminencia”, “un filósofo” o “un genio del arte moderno”; hasta los hubo aquellos que improvisaron una falsa biografía que bien podría haber sido premiada con el Cervantes.
Ante la falta de mejores candidatos, el nombre del peruano comenzó a tomar cada vez más fuerza. Y de allí al mito, hubo muy poco. A la pregunta “Queda solamente para llamar a Ferrante Kramer.... Perooo... ¿Quién carajo es este Ferrante Kramer?”, salieron al ruedo los que decían no saber nada, como también los fabuladores de siempre -dispuestos a contestar cualquier pavada con tal de figurar-, que afirmaban haberlo visto varias veces por televisión, que era “una eminencia”, “un filósofo” o “un genio del arte moderno”; hasta los hubo aquellos que improvisaron una falsa biografía que bien podría haber sido premiada con el Cervantes.

Lo encontraron en la pensión de “Don Horacio”, en Villa Martelli, sitio donde paraba por aquel tiempo. Afortunadamente, el titán de Tumbes pudo atender el teléfono aquella tarde... No estaba borracho ni drogado...

Pero lo sorprendió el hecho de que el llamado fuera de una Editorial y para hacer una entrevista... Lo sorprendió tanto como el nombre de quien sería su entrevistado... “Quién será Saramago, quién será...?”, se preguntaba mientras escuchaba a los de la Editorial rogándole su participación. Sin embargo, esta vez su ignorancia terminaría beneficiándolo.


Cuando los de Planeta se contactaron con el autor de “El evangelio según Jesucristo” y le mencionaron al “...Gran maestro Ferrante Kramer” como la persona que lo entrevistaría, Saramago acusó cierta extrañeza.... ¿Se le habría perdido algún nombre entre los tantos grandes de la literatura?... ¿Sería alguien nuevo, joven... O medio tardío como él, que hubiera comenzado recientemente a escribir?...
A pesar de no registrar al peruano, Saramago no opuso traba alguna. Tenía por norma no discutir con las Editoriales; además, sabía que las elecciones que hacían eran serias, cuidadas... Y confió... Una pena...
La reunión sería en la habitación del hotel donde casualmente se encontraba, sobre Carlos Pellegrini, casi esquina Lavalle.
Continuará....
8 comentarios:
jajaj, que grande el Peruano, hombre de letras es!!!
Me mata la Disco del Peruano, genial!!! falta la bola de espejos...
Besitos
No dudo que de la maestría del magnífico Peruano, pero... con Saramago? es como para ir sintiendo verguenza?
Saludosssss
Claudia, sabíamos que te iba a pegar El vino griego de José Vélez!. Pero veo que la disco pudo más...
Leo, Ferrante Kramer con Saramago... Sí!!... Y qué??... Pensás que Demian no está a la altura de Don José. Cuando termine la historia, me contás!.
Un abrazo a ambos.
Patricio
Vamos Peruano!!!.. Con Saramago, nada menos!.. Por fin se te da una. Creo que se viene la reivindicación del peruano, o me equivoco??
Laura
No puedo decir que estoy de vuelta, no, si el puto semestre aún no acaba y de verdad que ya estoy harto... pero me ha gustado tanto esta historia, me distraje un poco. Por cierto, creo que el que el Peruado Dorado haya enviado su solicitud de conserje a la editorial planeta se debe a que éste consideró que dicha editorial necesitaría un conserje inmiscuido en el medio. Eso creo yo...
Un abrazo!
Muy buena apreciación la tuya, Itocuaz. Un abrazo y gracias por tu visita.
Patricio
Digna historia de un mediocre como Demian. Metido con Saramago... Válgame Dios!. Espero que no se ofenda la figura de un grande de las letras de verdad. Peruano, te sigo a muerte,por detrás!
Mrs. Robinson
"No estaba borracho ni drogado..."
Al menos...
Con lo de lanzacuchillos no se dió cuenta que el puesto era para el sujeto al que se los lanzan... ;-)
Ya me imagino al peruano después de la llamada de la editorial:
Sara el Mago??
Me voy a la segunda parte...
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