13 octubre, 2007

Sanguchito de ojete - Última parte

Demian ya se encontraba preparado para su show. Y Maldonado, bisturí, anestesia y cámara en mano, se disponía a filmarlo para llevarlo al altar de la popularidad...

- “Bueno, acá estoy, colita fresca!”, dijo Demian al Maldonado... Éste no se había dado cuenta que Demian se había desvestido; estaba muy concentrado en su filmadora...

- “Ok!”, dijo... Pero cuando levantó la vista y lo vio, quedó como petrificado.

Con más de 70 años encima, aquel viejo Coloso de las Letras latinas, lucía formidablemente. De espaldas, y pidiéndole a Maldonado que le anestesiara la zona del corte para no sentir dolor, Demian lucía un apolíneo cuerpo digno de un mozalbete de 20...

Era la imagen del Apolo griego con el que solían ilustrar los manuales Kapelutz de la escuela primaria.

Entretanto, Maldonado continuaba como catatónico. No hablaba, no se movía. Y Demian seguía impartiendo órdenes, golpéandose los cantos, como reclamándole iniciar la filiación y terminar con el asunto.

Afuera, Walter, Dobetti y los otros aguardaban en silencio. Querían escuchar tras las paredes lo que sucedía entre ambos. Pero solo oían los reclamos gallardos y valientes del peruano: “Vamos, Maldonado, corte de una vez!”... No cabía duda alguna que Demian estaba decidido a cortarse el culo y comérselo como ese loco que había salido en los diarios, con tal de alcanzar el éxito.

De pronto, aquella arenga del Peruano se detuvo y se escuchó un grito escalofriante. Luego otro grito, y después muchos más... Todos afuera se llevaron sus manos a la cara. Era obvio que el sufrimiento de quien era su “Maestro” los estaba volviendo a la realidad. Muchos se estaban arrepintiendo de la idea, se notaba en sus rostros...

- “Yo no aguanto más escucharlo sufrir, paremos esto!”, dijo Aguirre Caspa ...

- “A quién se le pudo haber ocurrido esta idea loca de que se corte el culo en rebanadas y se lo coma ante las cámaras de TV”, reclamó, como si él no hubiera participado de la propuesta. Sin embargo, todos callaron, como asintiendo que no podían soportarlo un segundo más...

- “Yo entro!”, dijo con determinación Dobetti, y atinó a agarrar el picaporte.

No hizo falta. Como si estuviera ensayado, la puerta se abrió. Era Maldonado, que salía, cámara en mano, y con la cabeza baja, como avergonzado por algo...

- “Che, escuchamos gritos”, dijo Walter, “... Qué pasó, cómo esta Ferrante, pudiste hacerle la incisión en el orto?”, inquirió temeroso de la verdad.

- “Esteee... Más o menos... No le entré a fondo... Medio que me acobardé!.”, respondió.

- “Che, y decime... Por qué gritaba... Le alcanzaste a poner anestesia antes de....?”, y no terminó la frase, Maldonado lo interrumpió...

“Si, Walter.... Le puse todo el pomo, no sé porqué gritó tanto”, dijo, mientras seguía rumbo a la puerta de calle.

- “Lo filmaste, se ve cuando se come la carne?”, agregó Liberatti, no conforme...

- “Sí, filmé, y se ve bien cuando se la come”, respondió.

Todos se miraron, como buscando una respuesta más acabada. Pero había algo en aquellos ojos cómplices que indicaba que la “respuesta más acabada” la “acababan” de escuchar del propio Maldonado. Definitivamente, nadie entraría a la habitación para saber más...

Liberatti, viejo lobo de mar, comprendió la situación al toque: con ese vídeo, Demian no alcanzaría la fama....

Y cerró el asunto, con un: “Vayámonos, el peruano debe haberse quedado dormido por la anestesia”.

1 comentario:

Anónimo dijo...

El vídeo de Demian lo pueden encontrar en http://youtube.com/sanguchitodeojete/demianaldesnudo/maldonado.insert/mela.com

Walter Maldonado
Director de Cine
Steve McLogan Team