Todos sabemos que la infancia de Ferrante Kramer no fue fácil.
Podríamos decir que fue más bien un infierno. Eclipsado por la figura excluyente de su hermano mayor, Dionisio, la niñez de Demian transcurrió de manera anodina, transitando entre la búsqueda de un mundo sublime, ideal, íntimamente vinculado a lo que ya desde niño avizoraba sería su Meca -la literatura-, y la más absoluta indiferencia de su familia y amigos.
Ferrante no encontraba su lugar en Tumbes. Nadie esperaba nada de él, porque simplemente ignoraban su presencia. Vaya uno a saber cuál fue la causa, pero de los 4 hermanos, Demian siempre fue considerado un cero a la izquierda.
La venida de Duilio y Danilo al mundo -sus otros dos hermanos-, 4 y 8 años después que él, respectivamente, no hizo más que agravar la falta de atención de sus padres -Doroteo y Felisa-.
Aquel escenario hostil para quien años más tarde sería el autor de La Biblia Peruana, fue el motivo de la toma de una decisión que marcaría al Coloso de Tumbes a lo largo de su vida. Un suceso que acabaría en drama. Un hecho traumático que lo llevaría a ser quien es, y que de alguna manera explica su carácter voluble y su personalidad bipolar.
La historia de hoy, cuenta lo que, creemos, fue el puntapié inicial de una debacle que no ha encontrado fin hasta nuestros días....
Transcurría el año 1948. Un verano caluroso como poco en años, era el mudo testigo de una escena habitual en la posada de los Ferrante Kramer en Tumbes...
Dionisio, con apenas 20 años a cuestas, seductor y decidido, había tomado el mando de la casa; se había constituido en el líder de la familia y quien daba las órdenes, incluso llegando a doblegar el fuerte carácter de su padre.
Duilio y Danilo, de 11 y 7 años, ocupaban su espacio también, ganado con mimos y risas que Doroteo y Felisa festejaban a cada momento.
En tanto, Demian, con 15 años, era la contracara del grupo. Aún virgen, sin novia a la vista, y de pocos amigos, estaba asignado a las tareas domésticas de la casa, especialmente la limpieza y la comida. En otros tiempos, sencillamente habría sido confundido con un esclavo...
No obstante el pobre lugar al que había sido relegado, Demian nunca dejó de plantearse la necesidad de darle un vuelco a su vida, algo que logró, por cierto. Y aunque sus detractores afirmen socarronamente que “... el peruano volcó muchas veces...”, no se refería el Coloso a esa clase de vuelcos ni puestas de espalda, como maliciosamente afirman aquellos, sino a “... lograr un lugar en la posada de los Ferrante Kramer, y ser reconocido por sus padres como uno más de la familia”. Después de todo, razón tenía. Eran 4 los Ferrante Kramer, y todos debían gozar de los mismos derechos y obligaciones.
Pero así como se sabía justo merecedor de un sitio en aquella casa, Demian también era consciente de que su reclamo era tardío... Había cedido muchas posiciones, y solamente quedaba la posibilidad de ganar el terreno perdido “demostrándole a todos que él también era capaz de hacer lo que fuera necesario para lograr respeto y admiración”.
Ferrante no encontraba su lugar en Tumbes. Nadie esperaba nada de él, porque simplemente ignoraban su presencia. Vaya uno a saber cuál fue la causa, pero de los 4 hermanos, Demian siempre fue considerado un cero a la izquierda.
La venida de Duilio y Danilo al mundo -sus otros dos hermanos-, 4 y 8 años después que él, respectivamente, no hizo más que agravar la falta de atención de sus padres -Doroteo y Felisa-.
Aquel escenario hostil para quien años más tarde sería el autor de La Biblia Peruana, fue el motivo de la toma de una decisión que marcaría al Coloso de Tumbes a lo largo de su vida. Un suceso que acabaría en drama. Un hecho traumático que lo llevaría a ser quien es, y que de alguna manera explica su carácter voluble y su personalidad bipolar.
La historia de hoy, cuenta lo que, creemos, fue el puntapié inicial de una debacle que no ha encontrado fin hasta nuestros días....
Transcurría el año 1948. Un verano caluroso como poco en años, era el mudo testigo de una escena habitual en la posada de los Ferrante Kramer en Tumbes...
Dionisio, con apenas 20 años a cuestas, seductor y decidido, había tomado el mando de la casa; se había constituido en el líder de la familia y quien daba las órdenes, incluso llegando a doblegar el fuerte carácter de su padre.
Duilio y Danilo, de 11 y 7 años, ocupaban su espacio también, ganado con mimos y risas que Doroteo y Felisa festejaban a cada momento.
En tanto, Demian, con 15 años, era la contracara del grupo. Aún virgen, sin novia a la vista, y de pocos amigos, estaba asignado a las tareas domésticas de la casa, especialmente la limpieza y la comida. En otros tiempos, sencillamente habría sido confundido con un esclavo...
No obstante el pobre lugar al que había sido relegado, Demian nunca dejó de plantearse la necesidad de darle un vuelco a su vida, algo que logró, por cierto. Y aunque sus detractores afirmen socarronamente que “... el peruano volcó muchas veces...”, no se refería el Coloso a esa clase de vuelcos ni puestas de espalda, como maliciosamente afirman aquellos, sino a “... lograr un lugar en la posada de los Ferrante Kramer, y ser reconocido por sus padres como uno más de la familia”. Después de todo, razón tenía. Eran 4 los Ferrante Kramer, y todos debían gozar de los mismos derechos y obligaciones.
Pero así como se sabía justo merecedor de un sitio en aquella casa, Demian también era consciente de que su reclamo era tardío... Había cedido muchas posiciones, y solamente quedaba la posibilidad de ganar el terreno perdido “demostrándole a todos que él también era capaz de hacer lo que fuera necesario para lograr respeto y admiración”.
Y contrario sensu de lo que estarán pensando en estos momentos quienes están leyendo esta historia, no fue la literatura su objetivo primigenio para salir de perdedor en aquella disputa del poder familiar, sino la gastronomía.
Demian sabía que era ducho en las artes culinarias, y que allí tenía una clara ventaja competitiva en relación al resto de sus hermanos. Pero le faltaba mucho para llegar a la excelencia.... Si quería sorprenderlos a todos, tendría que “aprender más”, se dijo para sí. Aquella reflexión lo llevó a golpear la puerta de la casa de un hombre que cambiaría su vida.
Se llamaba Bruno Aparicci, rondaba los 40, y era chef internacional. Por razones que pocos conocían, había recalado hacía unos años en Tumbes. De él no se escuchaban más que loas y elogios debido a los magníficos platos que servía en su “ristorante”
Especialmente, las pastas caseras...
Continuará...
Demian sabía que era ducho en las artes culinarias, y que allí tenía una clara ventaja competitiva en relación al resto de sus hermanos. Pero le faltaba mucho para llegar a la excelencia.... Si quería sorprenderlos a todos, tendría que “aprender más”, se dijo para sí. Aquella reflexión lo llevó a golpear la puerta de la casa de un hombre que cambiaría su vida.
Se llamaba Bruno Aparicci, rondaba los 40, y era chef internacional. Por razones que pocos conocían, había recalado hacía unos años en Tumbes. De él no se escuchaban más que loas y elogios debido a los magníficos platos que servía en su “ristorante”
Especialmente, las pastas caseras...
Continuará...
6 comentarios:
Hola Alex, Patricio y Demian…estoy algo preocupada no solo por la infancia terrible que imagino terminaran develándonos, sino por un cambio abrupto que noto en sus notas… Expresiones tales como “manera anodina” o … “ a lo que ya desde niño avizoraba…”
y la referencia “… carácter voluble…” o la inclusión de la palabra “ recalado”
No solo ha llamado mi atención sino que ha obligada a que lea dos veces la nota… pregunto Demian la leyo? Dijo algo o solo quedo mirando fijo y balbuceando?
Cuando llegue a “…puntapié inicial de una debacle…” realmente estaba confundida, pero al leer “Y a contrario sensu de lo que estarán pensando en estos momentos quienes están leyendo esta historia, no fue la literatura su objetivo primigenio…” comprendí que todo esto era un mensaje encriptado
Esto tiene que ver con el retiro de las notas de l blog….??
Muchachos queridos, espero que estén bien…desde aquí les brindo mi incondicional apoyo (aun cuando me ausente a menudo del medio)
Manteniendo el leguaje del texto, concluyo mis líneas con un Ósculo a cada uno
Maraia, no sabés cuánto falta nos hacía una visita tuya!!... De alguna manera, nos censuraron. Una pariente de los mencionados en la nota del Peruano Dorado en Monterrey, la del Chavo, nos llevó a tener que retirarla del Blog. Al igual que con el homenaje al Peruano que le hizo ITOCUAZ, de México, que era una joya.
Por eso te pido que alientes a los seguidores de Demian para que dejen COMMENTS en el Blog, como apoyo a todo esto que construimos con tanto esfuerzo y ganas.
Creo que hasta nos han castigado con algún VOTO NEGATIVO,porque de golpe salimos del ranking de Blogalaxia y quedamos en la categoría de IMPOPULARES.
Y respecto a lo que decís sobre términos que te llevaron a leer la nota un par de veces para comprenderla, hay algo de casualidad y un poco de doble mensaje -o doblete-, que se develará en su desarrollo.
Un beso, y pedí apoyo a tus amigos para que dejen COMMENTS que nos ayuden a salir de este asunto.
Besos.
Patricio
Una vida con marcas profundas desde el comienzo.
Amigos de DFK no se rindan! No se dejen abasayar por algún que otro "palo en la rueda". Seguiremos con el peruano en sus Triunfos y en sus "Fracasos".
Un Abrazo!
No puedo mas que solidarizar contigo Alex, Patricio y Demián...es más! El Peruano Dorado volverá a mi sidebar!! porque toda historia, por mas fantasía que le pongan, es nada a lado de la gran creatividad en equipo....!!
Despues de leerlos hoy.. puedo comprender tantas cosas que le pasan a Demián y seguro.. de lo que le seguirá pasando...
Un abrazo con entusiasmo y alegría siempre!!
Ali
a mis queridos amigos buen augurio y Demian paso a ser un mimado mio, je ;)
besos y sigamos que esto esta mas que bueno
es tremendo lo que sufrió el peruano. me dan ganas de denunciar el hecho a crónica tv. veremos como le fue al peruano en el rubro gastronómico...
Publicar un comentario